AFGHAN WHIGS - "How Do you burn?" (2022)

 Comentaba el otro día en Fb tras la enésima escucha del tremebundo "In spades" de hace ya unos años: "No sé si hago bien de recuperar el ahora penúltimo AW de hace un lustro, por aquello de ser uno de mis favoritos suyos y las precipitadas comparaciones odiosas de turno, justo antes de enfrentarme al nuevo. Pero vaya, qué más da al fin, no creo que Don Gregorio me la cague mucho a estas alturas"; y añadía también en comentarios: "Creo que es la banda/persona que mejor ha sintetizado suciedad garagera y elegancia soul de siempre"... Pues miren, lo segundo lo sigo pensando y nadie me va a mover ya de ahí (me planto). En cuanto a lo primero... Caray, menuda basura de pitoniso que estoy hecho. Las cosas como son. Vaya si la puede cagar el Sr. Dulli. Mucho.  Y de qué manera. Toca hoy texto rancio, a cara perro y de fans a medio camino entre la indisimulable decepción y el mosqueo más inesperado. Y puede que, en efecto, sea servidor un desagradecido de la peor calaña; que alguien que ha firmado obras tan importantes para quien suscribe como "Gentlemen", "Black love" y "1965", sin olvidar el ya mencionado "In spades", debiera y debe tener crédito universal en el casino... Pues sí, ciertamente, no lo negaremos tampoco. Sin embargo, ay caray, también está aquello del "no todo vale"... Y, en efecto (y para mi desgracia), "How do you burn ?" no sólo me parece lo peor con holgadísima diferencia que jamás haya grabado esta tan necesaria banda/persona sino, directamente, de una autocomplacencia y falta de músculo completamente inexcusables e indignos para alguien que ha alcanzado los sonados logros firmados por quien/es hoy nos ocupa.

Lo bueno, lo salvable, es que si nos enfrentáramos con "How do you burn ?" a un single con " I'll Make You See God" por una cara y "Please, Baby, Please" por la otra, tendríamos incluso una pequeña joya para futuros coleccionistas/completistas de los tiempos venideros. ¿Lo malo?... Pues todo lo demás que no sean ese par de canciones o, seamos justos aún dentro del cabreo, la pieza final del lote. Lo que deviene en una pena de las grandes, está claro, y por mucho que se recupere para la ocasión a vocalistas de antiguas colaboraciones en trabajos de postín, por no mencionar la aparición ocasional del mismísimo y añorado Mr. Lanegan, faltaría. Y es que, vayamos al problema principal ya de frente y sin anestesia: ¿por qué esta mierda de producción?. Exagerada, falsariamente épica, desangelada y artificial hasta puros límites "coldplayisticos". Aquí no hay ni la suciedad garagera sútilmente matizada (todos sus discos hasta "Black love") ni la devoción soul oportunamente electrificada (todos sus discos a partir de "1965") de costumbre. Por contra, encontramos una saturación de sonidos que hasta por momentos parecen pre-programados con el pc tools de turno y una pomposidad tan improvisada como forzada hasta el delirio... del productor. Y de acuerdo que nunca huyó Dulli de la interpretación al límite, de la hipérbole pasional (lo que nos ha dado siempre ese encanto tan suyo del tipo que, sin tener un registro privilegiado, sí sabes que se va a dejar todo lo dejable en la práctica). Ni él ni la banda. Pero siempre, hasta ahora, era desde ese volante: "la interpretación", y valiéndose siempre -o casi, al menos- de una "instrumentación clásica", ayudada a veces por segundas voces, teclados y hasta vientos de varios tipos acunando, faltaría, unos guitarrazos de padre y muy señor nuestro las veces. En oposición a ello, "How do you burn ?" huele demasiado a chip quemado. A botones apretados para lograr un millón de orcos digitales generados por software desde la nada. Demasiada impostura, demasiada carencia de alma y demasiado de unas baterías/percusiones que son para cagarse un muy mucho en la puta es lo que hallaremos aquí. 


"How do you burn ?", finalmente, me parece más un disco ideado en sala de juntas acordando un sonido que ensayado en estudio logrando canciones. Y qué rabia, qué frustración ese final de "In Flames", tratando de salvar los muebles a la desesperada y sonando, al fin, como conviene esperar, ni que sea parcialmente... Pero, claro, demasiado tarde. Lo peor, además, es que se adivinan varios momentos que atacados a "la vieja usanza" hubieran pasado a engrosar, sin problema y con orgullo, el ya de por si estupendo y nutrido legado de la formación. Hay como tres o cuatro piezas que no las salva ni el Tato, está claro. Pero otras... ¿qué final es ese para "Concealer"?; ¿de verdad "The Getaway" necesitaba tantos intrumentos/samplers?, ¿por qué a "Domino and Jimmy" se le deja morir en la orilla en esa conclusión que parece sacada de un video de Feeder, Travis, Keane o alguna bosta del estilo?... ¿Dónde está el desgatiñe hasta rajarse la gargante Dulli?¿Y los matices soul de los good old times? Por no hablar de los guitarrazos, claro (que con eso -o su ausencia de eso, mejor- ya me puedo echar a llorar directamente). En fin, qué no sea el último suyo. Por favor, que esta banda y este músico no pueden despedirse con algo tan regulero. Son demasiado buenos y necesarios. Al menos para mi, pues realmente ya hace demasiado que dejaron de estar en disposición de dejar de serlo alguna vez. Y por mucho  "How do you burn ?"  o un centenar de "How do you burns ?" se me crucen. 

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